Los hurones

Aunque lo habitual es tener como mascota un perro o un gato en casa, otros pequeños mamíferos, como los hurones, se adaptan perfectamente a la vida en familia. Son animales, sin emnbargo, que requieren de unas especiales atenciones y cuidados que las diferencias de mascotas más habituales, como perros o gatos. Especificades que se refieren a su alimentación (necesidad de disponer permanentemente de agua, digestiones rápidas, restricciones hacia determinadas comidas…); para facilitar la convivencia doméstica; a su manejo y cuidados etc.

Alimentación

La ingesta diaria aproximada en materia seca es de 20-40 gr. al día. Siempre deben tener a su disposición agua fresca, y suelen beber entre 75-100 ml de agua al día.

Su digestión es muy rápida, dura tan sólo 3-4 horas. Por eso no pueden estar sin comer más de 4-5 horas seguidas.

Son carnívoros, aunque a veces también comen otros alimentos. Existen piensos comerciales específicos para ellos aunque, si se tiene urgencia, también se les puede alimentar con pienso para gatitos, pero sin abusar de este tipo de pienso.
No pueden tomar lácteos, chocolate, cafeína o piensos de gato a base de pescado.

Relación con la familia

Son mascotas cariñosas, curiosas, juguetonas y con vitalidad. Su formar de entretenerse es incitar a las persecuciones, “robar” y esconder objetos, mordisquear cosas... A veces estos juegos pueden provocar algún disgusto (pequeños mordisquillos, ingesta de objetos, electrocución por mordedura de cables, caídas, etc.).

Pueden convivir con personas y otras mascotas, pero la introducción de cualquier otro animal en casa siempre debe ser poco a poco. Cuidado con la presencia de pájaros o mamíferos de pequeño tamaño porque los podría considerar presas.

Para evitar cualquier sorpresa es mejor mantenerlo en su jaula si no se le puede vigilar.

Cómo les gusta vivir

No tienen ningún problema en estar dentro de una jaula, siempre y cuando su alojamiento cumpla una serie de condiciones. Pero los paseos fuera de la jaula son necesarios.

Requieren temperaturas entre 15-25 ºC y son sensibles a temperaturas extremas (>32 ºC).

El dormitorio ideal para un hurón es una jaula de armazón metálico con 100 cm de largo, 60 cm de ancho y 60 cm de altura (mínimo 60x35x24). Esta jaula debe tener una bandeja de plástico y el suelo de la jaula con heno o virutas de madera (no serrín). El dormitorio se puede hacer con una toalla o prenda que no pueda roer ni engullir. La letrina se puede hacer con piedritas de gato y se deberán retirar los desechos del hurón a diario.

Es interesante poner varios pisos a la jaula para que puedan trepar y dormir en varios sitios, así como enriquecer la jaula con juguetes de plástico duro o madera. Cuidado con no dejar a su alcance objetos que puedan romper y/o tragar.

Manejo

Para evitar accidentes cuando se manipula a estas mascotas, hay que aprender la forma correcta para manejarlas.
Si se quiere coger a un hurón o sacarlo de la jaula, se le debe sujetar por el pliegue cutáneo y dejándole el cuerpo suspendido sin tocar el suelo. Una mayor inmovilización requiere, a veces, la ayuda de otro colaborador, sujetándole la cabeza a nivel del cuello y las extremidades posteriores a nivel de la cintura pélvica.

Siempre hay que tener precaución, ya que al enfadarse, o si son animales no acostumbrados a ser manipulados, pueden intentar morder.

Olor

Los hurones tienen un olor peculiar. Poseen unas glándulas que emiten ese aroma corporal característico, y estas glándulas dependen de las hormonas sexuales.

Los machos al ser castrados reducen este olor. El veterinario puede aconsejar sobre la frecuencia de los baños y otras medidas higiénicas.

Cuidados

Cuando se introduce un nuevo hurón en casa debe ser revisado previamente por el veterinario, que debe establecer el protocolo de desparasitación y vacunación, así como colocarle el microchip.

Problemas más frecuentes que pueden padecer
• Problemas de piel.
• Ingestión de cuerpos extraños.
• Gastroenteritis.
• Problemas hormonales.
• Enfermedades víricas.
• Las hembras de hurón son un caso especial, ya que si entran en celo y no están con un macho pueden desarrollar una enfermedad hormonal

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