Tras las comparecencias se abrirá el plazo de presentación de enmiendas al articulado de la iniciativa. La previsión es que el pleno vote la proposición de ley antes de verano.
CiU, que mantiene la libertad de voto de sus diputados, decidirá el futuro de la fiesta en Catalunya. Fuentes del PSC ven «posible» llegar a un «punto de encuentro» con la federación nacionalista para evitar el veto. Los socialistas estudian dos vías para alcanzar un pacto: festejos con muerte del animal pero menos cruentos y una moratoria de equis años antes de aplicar la prohibición, periodo durante el que se debilitaría más la ya agonizante afición a los toros, cabe suponer.
Josep Rull, diputado abolicionista de CiU, dice que no ha habido ningún contacto con el PSC y que es «casi imposible» una tercera vía que contente a proanimales y a taurinos.
Por el contrario uno de los diputados de CiU que consideran que la abolición sería «un disparate» dice que al PSC no le costaría encontrar «un espacio de complicidad» con ellos. Si bien reconoce que a no pocos convergentes, incluso taurófilos, les gustaría «por intereses partidistas» que los toros se prohibieran con José Montilla como president.
FUENTE: RAMÓN VENDRELL, para elperiodico.com
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