De trato afable, atento, amable pero no exento de ramalazos de carácter. Isidoro Mollá es presidente de la Asociación Empresarial de Veterinarios Clínicos de la Provincia de Alicante (AEVA) desde que, de la mano de un grupo de compañeros, se decidieron a promover en 2011 una de las primeras patronales del país. Su iniciativa fue menos rompedora que el paso dado años después cuando en 2014 contribuyó con su firma al primer convenio colectivo de este sector en España. Para ambas cosas -reconoce sin ambages- “la ayuda del colegio fue clave”. Casado y padre de dos hijas acumula varias décadas al frente VetClínics, con cuatro centros en la provincia. Mollá acepta orgulloso su doble condición de empresario y de cirujano de tejidos blandos. De 1987 a 1999 fue, además, alcalde de su pueblo y hoy mantiene su compromiso con Benissa como edil.
P.- ¿En 2011 fundó AEVA. ¿Qué recuerda de aquello?
R.- Un grupo de profesionales, propietarios de algunas de las clínicas más reconocidas de Alicante habíamos comentado en repetidas ocasiones la necesidad de generar un marco laboral adecuado para darle mayor proyección a nuestros centros y definir las carreras profesionales. El primer paso fue constituir una patronal para prestigiar, profesionalizar y defender los intereses del colectivo empresarial ante la Administración e instituciones. Fue un momento apasionante porque constituimos una de las primeras patronales veterinarias del país. Éramos conscientes de la importancia de fundar AEVA para el futuro de nuestras clínicas, como así ha sido.
P.- En 2014, se firmó el primer convenio de clínicos del país, ¿qué tenía Alicante para ser pionera?;
R.- La voluntad de los empresarios de conformar un sector moderno, profesionalizado, en el que nuestros equipos tuvieran un futuro y una carrera bien definida. Retener el talento y mejorar el servicio requiere de equipos honestos y motivados. La colaboración del colegio fue clave tanto en la creación de la asociación como en el desarrollo del proceso negociador con los sindicatos que nos llevó a firmar un convenio de ámbito provincial, que fue la base para dar el reconocimiento que se merecen los profesionales y normalizar cuestiones clave como las guardias o las carreras profesionales.
P.- ¿En 2020 llegaría el primer convenio nacional. ¿Sigue Alicante por delante en materia de derechos y condiciones laborales con respecto al resto del país?
R.- La provincia de Alicante es un territorio en el que los veterinarios estamos a la vanguardia del sector. Nuestras clínicas están en primera línea de conocimiento, tecnología y atención a las mascotas y a sus tutores. Por tanto, es normal que estemos también a la vanguardia en derechos y condiciones laborales.
P.- Defina los rasgos diferenciales del empresario clínico alicantino.
R.- No difieren mucho del perfil general del empresariado de Alicante. Son, por lo general, pequeñas empresas, con menos de 10 trabajadores, muy ágiles y flexibles, que normalmente ofrecen un servicio de la máxima calidad. Somos emprendedores y con ganas siempre de actualizar conocimientos.
P.- AEVA e Icoval organizan cada año un congreso en IFA, que ya es cita obligada para cientos de veterinarios. Las relaciones parecen –inusualmente, diría en comparación con otras latitudes- buenas.
R.- La relación es inmejorable. Tenemos gran sintonía sobre cuáles son las cuestiones más relevantes para el sector veterinario y la forma de afrontarlas con éxito. La existencia de AEVA, la puesta en marcha del convenio y, ahora, los congresos (para veterinarios, que llega a su octava convocatoria, y el de auxiliares, que alcanza la tercera cita) evidencian que las instituciones son más fuertes y representativas cuando trabajan coordinadas. Si este no es el formato habitual, debiera serlo.
P.- Fue alcalde de Benissa casi dos legislaturas y hoy sigue como edil, ¿qué le motiva a mantener ese compromiso?
R.- El amor por nuestra gente, por nuestra cultura y por la lucha constante en preservar el valioso patrimonio medioambiental. Y por aportar mi experiencia y visión de futuro para que los ciudadanos de Benissa tengamos un mayor bienestar. El servicio público es algo que todos deberíamos probar alguna vez en la vida.
P.- ¿Qué se siente más, empresario o veterinario?
R.- Creo que con el tiempo y la experiencia he logrado el equilibrio entre ambas facetas. Este es un trabajo vocacional, en el que el amor por los animales y por su bienestar es fundamental, pero no es menos cierto que para dar un buen servicio y avanzar, es necesario tener capacidad organizativa y empresarial.
P.- Valore con tres calificativos las leyes de bienestar autonómica y nacional.
R.- Imprescindible, urgente y muy mejorables.
Puede dirigir sus consultas al Colegio de Veterinarios de Alicante enviando un mensaje a la siguiente dirección: secretaria@icoval.org