Puede dirigir sus consultas al Colegio de Veterinarios de Alicante enviando un mensaje a la siguiente dirección: secretaria@icoval.org
Veterinarios de toda España volvieron a salir a las calles de Madrid el pasado domingo, 3 de abril, para defender la profesión. Lo hicieron en una cifra similar a alcanzada el 17 de noviembre de 2019, esto es, entre las 3.000 personas que estimaron los organizadores y algo más de un millar, según la Policía Nacional. Se hicieron notar para exigir que se les considere como la la profesión sanitaria -que legalmente son- y se les aplique el IVA correspondiente a tal condición, entre otras reclamaciones. "Somos absolutamente invisibles", denunció el presidente del sindicato profesional de veterinarios de Asturias y miembro del comité ejecutivo de la Federación Estatal de Sindicatos Veterinarios (Fesvet), José Fernández Romojaro.
A la protesta acudió una delegación alicantina desplazada en coches particulares y entre la misma estuvo rpesente también el propio presidente de Ivocal, Gonzalo Moreno del Val
Los manifestantes, que arrancaron frente a dependencias del Ministerio de Hacienda junto a la Puerta del Sol y concluyeron a las puertas del de Sanidad, se vistieron con batas blancas y lazos verdes -los colores de la profesión- para denunciar que el colectivo se siente como "sanitarios de segunda".
Frente a Sanidad, diferentes profesionales entre los que se encontraba el veterinario Fernández Romojaro leyeron un manifiesto y expresaron sus reclamaciones al Gobierno. Entre las reivindicaciones destacó en sobremanera una: el reconocimiento 'real' de la Veterinaria como profesión sanitaria.
Multitud de problemas
Fernández explicó que de esta falta de reconocimiento de la profesión dentro del sistema nacional de salud derivan "multitud de problemas" . Por ejemplo, uno de ellos sería el IVA sanitario, para el que pidió que "se reconozca a los centros beterinarios como sanitarios, como una actividad de salud pública" y, por ende, "se aplique el IVA sanitario reducido, en lugar del máximo, del 21 %".
También, Fernández reclamó a la administración que los veterinarios que trabajan como inspectores de salud pública -que suponen el 80 % de todos estos profesionales- estén integrados dentro del sistema nacional de salud (SNS), preferentemente en atención primaria. Precisamente sobre las inspecciones de salud pública y la seguridad alimentaria, los manifestantes reivindicaron su "papel principal", a través de cánticos como "sin inspección, no hay chuletón".
Por otro lado, en numerosas pancartas se pudo leer "esta pastilla, no me la trago" en referencia a la problemática de estos profesionales con respecto a la (no) dispensación de medicamentos. "Hay una gran discriminación con respecto al resto de Europa" donde, según remarcó, "sí reconocen bien esta posibilidad" (la de venta). Para el veterinario, esta "absurda" cuestión provoca situaciones como que, por ejemplo, un veterinario no pueda "dispensar el tratamiento completo de su cliente".
Otra de las reivindicaciones en la que los profesionaleshicieron hincapié fue en la creación de una especialidad propia en Ciencias de la Salud, concretamente, la de Veterinaria de Salud Pública y Comunitaria. La última vez que los veterinarios se manifestaron fue hace dos años, tiempo durante el cual los asistentes coincidieron en resaltar que se ha puesto de relieve la importancia de esta profesión con respecto a la salud pública
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