Más de 150 colegiados acudieron el 24 de marzo a la convocatoria de la asamblea general extraordinaria impulsada por un grupo de veterinarios del Colegio de Alicante (Icoval). Como se recordará, los convocantes plantearon un único punto en el orden del día: ‘La imposibilidad de cumplir en su totalidad con la actual ley del medicamento veterinario en el día a día de nuestro ejercicio profesional’. Tras varias horas de intenso debate, se acordó elevar una serie de propuestas al órgano de gobierno colegial, que días después ratificaba la principal de ellas y promovía crear una nueva Comisión de Veterinarios Clínicos que constará de diez miembros y que tendrá una finalidad asesora.
El presidente de Icoval, Gonzalo Moreno de Val, introdujo el acto e informó a los asistentes que, en virtud de los Estatutos, los acuerdos que pudieran tomarse en la asamblea que entonces arrancaba “son propuestas para la Junta de Gobierno de este Colegio, quien acordará decisiones al respecto”. Y sin más preámbulo, concedió la palabra al colegiado Ignacio Marvá Ruiz, quien realizó una larga alocución para exponer la situación que, a su juicio, se da.
Soluciones vs culpables
Marvá fue especialmente crítico con una legislación que “nos muestra una realidad profesional que no se ajusta al momento actual”. Dado que la norma data de 1995, consideró que “todos somos responsables de haberla dejado asentarse tal y como está” por lo que abogó por “buscar soluciones y no culpables”. Y en tono más pragmático reflexionó sobre la situación y perspectivas que le queda al colectivo clínico: “Nos guste o no la Ley hay que cumplirla y tendremos que actuar a corto plazo para amoldar nuestra realidad profesional a ella, y a medio y largo para reivindicar el modelo profesional que defendemos”
Prescripción
Acto seguido, Marvá centró su crítica a la aplicación de tal normativa en tres puntos básicos: defendió la libertad de prescripción y la posibilidad de hacerlo según el principio activo (la DG de Farmacia así lo permite pero la AEMPS defiende que hay que mencionar el nombre comercial); reclamó eliminar la cesión de medicamentos como única forma de gestionar el botiquín veterinario y pidió liberar de carga burocrática a la actividad clínica.
Actuación colegial
El presidente de Icoval, por su parte, se limitó a situar algunas de las cuestiones planteadas y a informar, en su caso, sobre las gestiones ya realizadas en la materia aludida.
Se planteó, por ejemplo, establecer un protocolo claro que dejase menor margen de interpretación de la norma al veterinario. Del Val, advirtió que en 2012 ya se redactó y aprobó una guía y que ahora ya se había trabajado en una segunda actualización. El borrrador de este trabajo colegial y algunos cambios en la web colegial en los que ya se venían tragajando será debatido en la citada comisión.
Además de ello, Moreno informó sobre el compromiso alcanzado con el Consejo General de Colegios Veterinarios (CGCVE) para que priorice las gestiones que permitan habilitar al veterinario para poder comercializar medicamentos sin prescripción. De igual manera, alertó que ya se han producido positivos contactos con algunos laboratorios en este sentido. Junto a ello, advirtió que se presentarán alegaciones en esta misma dirección al reglamento europeo del Medicamento ahora en trámite.
Puede dirigir sus consultas al Colegio de Veterinarios de Alicante enviando un mensaje a la siguiente dirección: secretaria@icoval.org