El Consell Valencià de Col.legis Veterinaris (CVCV) participa en una campaña informativa sobre los efectos de la procesionaria del pino, sus métodos de control y para advertir a los propietarios de mascotas sobre los daños que esta plaga puede provocar sobre sus perros o gatos. Así lo explicaron el 20 de febrero en rueda de prensa el director general de Medio Natural y Evaluación Ambiental, Antoni Marzo junto al presidente y el vicepresidente del CVCV, Francisco Beltrán Andreu y Luis Miguel Gargallo, respectivamente, quienes presentaron los panfletos que se han elaborado para tal fin y que se distribuirán entre las más de 800 clínicas veterinarias valencianas.
La Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural está realizando labores de control, priorizando los alrededores de las áreas recreativas ubicadas en espacios naturales y caminos forestales. A este respecto, Marzo explicó que se está desarrollando la campaña de control de población de esta oruga para la próxima campaña, debido a que las acciones han de realizarse en otoño e invierno. En la actualidad, se están llevando a cabo prospecciones para conocer el nivel de incidencia que tendrá en el otoño e invierno.
Además, se han colocado 5.000 trampas con atractivos de feromona, la mayoría en espacios naturales protegidos y realizado tratamientos terrestres con mochila pulverizadora y con cañones hidroneumáticos. También se ha trabajado en 438 kilómetros de caminos rurales y forestales. En total se han cubierto 700 hectáreas.
La competencia en el control de insectos peligrosos para la salud pública corresponde a los ayuntamientos.
Crisálidas
En la actualidad se inicia la procesión de bajada de la oruga de los árboles para formar las crisálidas. Por ello se ha pedido a la población alejarse de estas orugas y no entrar en contacto, debido a los pelos urticantes que desprenden y flotan en el aire pueden provocar irritación en oídos, nariz y garganta en las personas así como intensas reacciones alérgicas y graves lesiones en los perros.
En los panfletos editados por el CVCV se dan una serie de consejos básicos para evitar la afección a las mascotas, como llevar al perro en los paseos atado y con corral. Los canes, al olfatear pueden verse afectados en cualquier parte del cuerpo, en sus mucosas especialmente, o inluso pueden tragarse las orugas. Los tejidos afectados se inflaman y pueden llegar a necrosarse, lo que puede ser mortal en algunos casos. Los síntomas de una reacción son: picor intenso, irritación cutánea, excitación exagerada, lengua inflamada, vómitos e hipersalivación. En tal caso, más allá de recomendar acudir al centro veterinario, el panfleto aconseja lavar inmediatamente la zona afectada con suero o agua bicarbonatada sin frotar y “nunca” tratar de hacer vomitar al animal.
Puede dirigir sus consultas al Colegio de Veterinarios de Alicante enviando un mensaje a la siguiente dirección: secretaria@icoval.org