La Agencia Europea de Medicamentos publicó en octubre el último informe ESVAC, que recoge los datos de venta de antimicrobianos de uso veterinario en Europa durante el año 2014. El informe sitúa a España a la cabeza del consumo con 418,8 mg/PCU, lo que supone un incremento del 25% desde 2011. En el resto de países que participaron en el estudio se produjo, durante el mismo periodo, una disminución general en las ventas del 12%. En el transcurso de la última junta interterritorial de presidentes autonómicos de colegios celebrada el pasado 17 de diciembre, Consuelo Rubio, subdirectora general de Medicamentos Veterinarios de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), refiriéndose a este informe, expuso el papel de los veterinarios en el programa de lucha contras las antibiorresistencias. El presidente del consejo valenciano, Francisco Beltrán Andreu, por su parte, defendió que el “margen de actuación” de los veterinarios en este terreno es “mínimo”, que se trata básicamente de un problema generado en la medicina humana y en el campo veterinario. “En nuestro caso, el problema reside en las directrices que los veterinarios deben cumplir y que son dictadas por las grandes empresas integradoras”, matizó.
ESVAC (European Surveillance of Veterinary Antimicrobial Consumption)1 es un proyecto puesto en marcha por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) a petición de la Comisión Europea para desarrollar un enfoque armonizado de evaluación de datos sobre venta y consumo de antimicrobianos.
Datos comparables
Para estandarizar y hacer comparables los datos de ventas entre los diferentes países, el estudio usa la “unidad de corrección de la población” (PCU), que se calcula multiplicando el número de animales vivos y sacrificados por su peso teórico en el momento previsible del tratamiento.
Esta unidad tiene en cuenta los diferentes tipos de animales (se estudia bovino, porcino, aves, ovino, caprino, peces y caballos y el uso de comprimidos en animales de compañía). También se tienen en cuenta las importaciones y exportaciones, tanto de animales para cebo como para sacrificio.
Salud y economía
La responsable de la AEMPS trasladó a los representantes colegiales hasta qué punto este asunto afecta a la salud y la economía con carácter mundial (en 2050 se prevé que mate a diez millones de personas en el mundo, más que el cáncer); en Europa son 37.000 los fallecimientos al año; y en España 2.500, con un impacto económico de 150 millones de euros.
Comentó cómo el fin de los antibióticos acabaría “con la medicina tal y como hoy la conocemos”, una de las razones por las cuales hay que abordar el problema con urgencia, y puso de relieve el citado informe.
Rubio informó sobre el Plan Nacional de Resistencia de Antibióticos puesto en marcha en nuestro país; y destacó que los veterinarios juegan un papel en el desarrollo de la antibiorresistencia, pero recalcó que ni el mundo animal ni el veterinario es el principal responsable de este problema. Fue tajante al afirmar que en España “no se comen antibióticos ni en la carne ni en los derivados lácteos” pero no descartó que en esos alimentos se puedan transportar genes de resistencia. Esto es, sí parece clara la vinculación entre el uso de antibióticos en ganadería y las resistencias en humanos.
Prohibición y multinacionales
El uso de antimicrobianos como promotores del crecimiento no está permitido desde 2006 en ninguno de los países participantes del estudio. Sin embargo, los antibióticos se utilizan en la ganadería intensiva principalmente para prevenir y tratar las enfermedades de los animales y se suministran con los piensos (cerdos) o en el agua (pollos). El uso preventivo de bajas dosis a grandes grupos de animales durante unos tiempos pautados, es difícil de distinguir, en la práctica, del uso para promover el crecimiento, que ya se ha dicho que está prohibido.
“Son las grandes empresas ganaderas, las multinacionales integradoras, las principales responsables del abuso de antibióticos. Los veterinarios, en la mayoría de los casos, se limitan a ejecutar las pautas marcadas en la alimentación y sanidad por estas multinacionales”, remarcó Beltrán (CVCV) tras la exposición de Rubio. Su intervención fue secundada por la mayor parte de representantes colegiales. Alguno de ellos, además, se preguntaron por las razones que conducían a las mismas mutinacionales integradoras a excederse en su recurso preventivo en países como España y a no hacerlo en otros Estados miembros.
- Art. sobre el informe de ESVAC
Puede dirigir sus consultas al Colegio de Veterinarios de Alicante enviando un mensaje a la siguiente dirección: secretaria@icoval.org