11-12-2015
“Es mucho más complicado que un anciano con problemas de movilidad o motricidad acceda a usar una pelota como terapia que, básicamente, hacer lo mismo pero jugando con un perro. Sí, definitivamente, los perros o tantos otros animales pueden ser la mejor medicina para las personas”. Así se manifestaba Salvador Marín Lillo al poco de recibir, a propuesta del Colegio de Veterinarios de Alicante (Icoval), el Premio Terapias Innovadoras en el transcurso de la Gala de Salud celebrada el 27 de noviembre.
El primer gran contacto con las terapias asistidas con animales lo vivió entre 1998 y 2004, periodo en el que trabajó como veterinario en el Safari Park Vergel. Durante aquellos años desarrollo de aquel pionero programa pudo comprobar en primera persona la positiva evolución en las habilidades sociales e intelectuales de pacientes con autismo y Síndrome de Down que interactuaban en el parque con los leones marinos que él tanto mimaba. Las dos décadas que hoy acumula Lillo como veterinario clínico de mascotas en diferentes centros veterinarios, así como sus experiencias con animales de zoológico en el citado safari o en Terra Natura (Benidom) le han permitido, además, ampliar sus conocimientos en etología canina, en la educación con animales domésticos e incluso a especializarse en cirugía de exóticos.
En última instancia y desde hace algún tiempo, este polifacético profesional colabora con el Centro de Acogida de Primates Primadomus (Villena).
Hoy, su actividad clínica la compagina con la docencia a varios niveles. Pero fue su experiencia dando clases de Formación Profesional en diferentes ciclos de la familia, sanidad y servicios a la comunidad la que le abrió las puertas de acceso a los profesionales que trabajan atendiendo a personas en situaciones de dependencia. Aquel backround variopinto acumulado durante décadas le permitió exhibir las posibilidades de la terapia asistida a los responsables de geriátricos, residencias o centros de educación especial.
“El trato con perros, caballos o delfines...no sólo está demostrando ser muy eficaz en los tratamientos de patologías neurodegenerativas sino que también se está acreditando que contribuye de forma decisiva al control de la agresividad en pacientes con trastorno bipolar o esquizofrenias”, explica entusiasmado.
Marín Lillo es actualmente bien conocido por su trabajo junto a la profesora Elena Maestre, también como docente, en el ‘Proyecto Animales en las Aulas”’ sobre intervención psicoeducativa facilitada con perros, en el CIPFP Canastell de San Vicente del Raspeig, que trata de formar a estudiantes de Ciclos de FP de la rama de sanidad en este tipo de terapias.
Sin formación reglada
“No existe demasiada gente trabajando en este terreno, entre otras cosas, porque tampoco hay una formación específica pero sí hay un importante nicho de mercado que atender y los veterinarios tendríamos que tener un papel más protagonista porque somos los que mejor conocemos a los animales”, lamenta Marín Lillo. Efectivamente, son los adiestradores caninos o los psicólogos los que están tratando de cubrir esta demanda creciente “cuando nosotros -los veterinarios- estamos tan capacitados o más”, advierte el premiado, quien a las pocas horas de recibir el galardón ya reconocía haber atendido a las preguntas de varios compañeros de profesión interesados en involucrarse y ejercer en este ámbito.
Gala UPSANA
Como ya es habitual, el Auditorio de la Diputación Provincial de Alicante (ADDA) -con capacidad para más de 600 personas- estuvo cerca llenarse. La VI Gala de Salud organizada por UPSANA (Unión Profesional Sanitaria de Alicante) celebrada el 27 de noviembre contó con las principales autoridades políticas y sanitarias presididas por la consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Carmen Montón y el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri (ambos en la segunda foto de la izqda). Se concedieron 19 premios (en la foto de la izqda, los galardonados), reconociendo trayectorias profesionales en el ámbito sanitario pero, sobre todo, el carácter social o solidario de los proyectos que se encuentran detrás.
Así, el Premio Especial de 2015 fue otorgado por UPSANA al Sanatorio Fontilles-San Francisco de Borja, mientras que los otros dos galardones colectivos también entregados a instancias de la asociación que agrupa a todos los colegios profesionales sanitarios de la provincia de Alicante correspondieron a Médicos del Mundo (Premio Cooperación Sanitaria,) y a la Asociación de Donantes de Sangre de la Provincia de Alicante, (Premio Asociaciones Solidarias). El resto recayeron en los profesionales designados por alguna de las corporaciones miembro de esta unión (de Médicos, Enfermería, Veterinarios, Fisioterapeutas, Odontólogos/Estomatólogos, Podólogos, Psicólogos, Dietistas/Nutricionistas y Farmacéuticos).
La nueva consellera aprovechó el evento para hacer una encendida defensa del “derecho a la salud, a una sanidad pública sin exclusiones ni aparheids sanitarios” y alabó la “profesionalidad y esfuerzo” de los profesionales sanitarios que, “en tiempos de recortes sé que han dado lo mejor”